
Claves para el estilo working girl perfecto
Existen algunas claves fundamentales para lograr un estilo working girl perfecto. Para empezar, los básicos pueden convertirse en nuestros grandes aliados, ya que la sencillez es la base para este tipo de looks. En este sentido, podemos apostar por camisetas lisas, camisas blancas, jeans pitillo, faldas lápiz o americanas, entre otras muchas piezas. Las camisas son imprescindibles en el armario de toda working girl. Podemos llevar una vaquera, muy de moda esta temporada, y fácil de combinar: con unos jeans ceñidos, unos pitillo negros, unos pantalones de campana, etc. En este último caso, nos veremos más favorecidas si metemos la camisa por debajo del pantalón. Las camisas blancas o rojas también son grandes clásicos de este estilo. Igualmente, las blusas son perfectas en esta ocasión, y aportan mucha elegancia a nuestra imagen. Para un aspecto más sofisticado, podemos conjuntarlas con una falda lápiz, aunque con unos jeans ajustados también quedan estupendas, especialmente si añadimos unos tacones al outfit. Los blazer son un básico que no puede faltar, pues es un complemento elegante y formal a la par que cómodo. Los encontramos de todos los colores, aunque los más recomendables son los neutros como el gris, el negro o el blanco, sin descartar los tonos pastel. Las faldas largas en principio pueden parecer inapropiadas, pero depende del modelo que elijamos. Debemos evitar las de carácter hippie, aunque las de líneas rectas y minimalistas pueden ser ideales. El único requisito es que sean formales, sin aberturas demasiado atrevidas, y que las combinemos con prendas glamurosas. Además, jamás hay que conjuntarlas con bailarinas o sandalias planas, sino con zapatos de tacón o cuñas. Para el verano, los vestidos también son una buena opción, siempre y cuando no sean escotados ni demasiado cortos. Como mínimo tienen que llegar a la altura de la rodilla, y no ser muy ceñidos. Lo ideal es que sean holgados y discretos, huyendo de los estampados llamativos y de las aberturas. El estilo lady like, por ejemplo, sería apropiado. En cuanto a los complementos, debemos aplicar la regla de menos es más. Lo mejor es que optemos por joyas discretas y finas, como pulseras, collares, anillos y relojes de diseños sencillos. Además, no puede faltar un bolso XL que nos permita llevar todas las cosas que podamos necesitar a lo largo de una larga jornada de trabajo. Todo ello junto a un maquillaje y un peinado natural. Y tú, ¿Cómo consigues tu estilo working girl? Para má sideas puedes consultar este otro post: looks para una working girl