Lo más importante antes de lanzar tu cuerpo a la arena es contar con los mejores complementos y looks playeros. El bikini es muy importante, por descontado, pero hay otros muchos accesorios imprescindibles para disfrutar de un día en la playa.

Una buena idea es elegir un vestido fresquito para llevar a la playa. Lo ideal es que te lo puedas quitar y poner con comodidad y que, encima, sea muy estiloso. Este diseño estilo pareo al cuello me ha encantado. Con él puedes acercarte un rato al chill out a tomar un cocktail sin que parezca que acabas de salir de la arena.
La cabeza es algo que no debes olvidar. Busca un sombrero que añada estilo a tu look playero y, además, te salve de sufrir una insolación. Hay muchos modelos diferentes pero no te confundas, estás en la playa. Apuesta por materiales como rafia o esparto.
Unas buenas gafas de sol pueden suponer la diferencia entre disfrutar del verano o acabar con daños en la retina. Por favor, apuesta por la calidad, eso se va a traducir en salud y beneficio para tus ojos. Olvídate de las super ofertas que no cumplen con los criterios de homologación necesarios.
Compra una buena bolsa en la que puedas meter absolutamente de todo. Ten en cuenta que vas a necesitar agua, un libro, una revista, algo para picar y todos los bártulos de playa. Si tienes niños, compra una mucho más grande.
Y, por último, no te olvides la toalla cuando vayas a la playa. Y no me refiero a esas de propaganda. Cuida los detalles.
Fuente Imagen Melissa Odabash para Clickini