En su origen estas colecciones estaban pensadas para aquellos ricos y poderosos que pasaban sus vacaciones en zonas con un clima cálido aunque en su ciudad de origen el frío estuviese muy presente. Se llaman colecciones crucero porque estaban pensadas para cruceros en barco por zonas paradisiacas. De ahí que en la mayoría de las ocasiones tengan cierto aire marinero.
Está claro que ahora las cosas han cambiado, pero estas colecciones siguen existiendo y son las que nos apuntan las tendencias de la nueva temporada cuando nuestras chaquetas y abrigos están aún en nuestro armario. Marcan el estilo que vamos a llevar en cuanto las temperaturas nos den una tregua.

Prada es una de las marcas de referencia que siempre saca este tipo de colecciones, y la de esta año homenajea el estilo y la feminidad de esas mujeres con glamour de los años 50. La colección está llena de color y optimismo, en contrapartida al frío y los looks más sobrios.
Las mujeres al más puro estilo Mad Men, impregnan una colección llena de estampados y colores fuertes. La tonalidad veraniega juega tanto en la ropa como en los complementos.
Prada nos presenta a una mujer fuerte, pero que no pierde un ápice de seducción y feminismo. Todas sus prendas se rinden al estilo retro y a ese aire del pasado en el que las mujeres no dejaban al azar ni un solo detalle de su indumentaria.
Los fotogramas de esta colección presentan un look book lleno de detalles y guiños a la seducción. Lo cierto es que este tipo de campañas se nos muestran como verdaderas obras de arte no solo por la maravillosa fotografía, también por lo cuidado de su puesta en escena.
Fuente Imagen Prada